QJ Motor va a por todas completando su gama de scooters de 125 cc con un Gran Turismo como el Fort 125 N que lo da todo tanto en equipamiento, con el nivel más alto de su segmento, como en tecnología al dotar a su motor de casi 15 CV con un sistema de microhibridación que aporta un “empujón” extra en las arrancadas convirtiendo su alternador en un motor eléctrico auxiliar. A todo ello se le suma, como hemos comprobado en esta primera toma de contacto, un comportamiento ejemplar, y un precio de adquisición muy competitivo de 3.999 € incluyendo 6 años de garantía y 1 año de seguro gratuito.

QJ Motor completa su gama de scooters en la cilindrada de la convalidación moto con carnet de coche con cinco modelos en todas las categorías: el LTR como opción urbana retro, MTX el potente polivalente compacto, ATR la alternativa CrossOver, SQ16 como Rueda Alta Premium, y ahora este Fort 125 N, un scooter GT con la intención de poner el listón más alto de su categoría. Con esta gama, QJ Motor se asegura que su potencial cliente de scooter va a encontrar el modelo que busca, con una fiabilidad garantizada por 6 años y un precio competitivo.

El Fort 125 N se viste con una estética de formas musculosas en la que se ha cuidado mucho la posición de conducción del conductor y un máximo aprovechamiento interior, todo ello acompañado de una parte ciclo en la que destacan sus ruedas de 15 y 14 pulgadas, casi de Rueda Alta, lo que ya de a entender que va sobrado de estabilidad. Esa estética musculosa contrasta con detalles cromados que aportan elegancia en unas molduras que envuelven los intermitentes delanteros y haciendo de falsas tomas de aire en los costados posteriores.

Full Equipment

Sobre esa base, QJ Motor ha dotado al Fort 125 N de un nivel de equipamiento muy superior al que ofrecen otros modelos con los que ahora compite. Por supuesto, no podía faltar el sistema antibloqueo ABS de doble canal independiente montado sobre discos de 256 mm de diámetro con su correspondiente pinza flotante de doble pistón delantera, y un posterior de 240 también dotado de pinza flotante, aunque en este caso de doble pistón. El ABS también integra el control de tracción TCS que evita que la rueda trasera patine sobre firme resbaladizo.

Tampoco podía faltar el sistema Smart Key por llave de proximidad que acompaña un pomo de contacto y dos botones para la apertura de la tapa del depósito de combustible y asiento. O el alumbrado 100% LED con doble óptica polielipsoidal en el faro, intermitentes por matriz de diodos, al igual que el piloto posterior desdoblado en dos, retrovisores anclados al carenado con mecanismo de plegado que los protege en caso de caída, manetas regulables en cinco posiciones, portabultos plano (posibilidad de acoplar cualquier tipo de baúl con un soporte universal) en fundición de aluminio integrando las asideras laterales para el pasajero, depósito con 11,7 litros de capacidad, parabrisas regulable eléctricamente de forma continua con mandos en la piña izquierda, dos guanteras frontales con doble toma USB en la derecha, caballete lateral en fundición…

Y como buen Gran Turismo que se precia de ello, el Fort 125 N cuenta con una capacidad de carga bajo el asiento para dos cascos (uno de ellos debe ser abierto), disponiendo en el interior de iluminación y un par de tabiques desmontables que se pueden montar en diferentes posiciones para adaptarse a las necesidades.

Tecnología de microhibridación

Para el motor, el Fort 125 N emplea una actualización del que ya conocimos en el compacto MTX 125. Se trata de una mecánica que rinde casi el límite de la potencia permitida para la convalidación 14,7 CV a 8.500 rpm acompañada de un par motor de 12 Nm a 8.250 rpm gracias a su refrigeración líquida con radiador adosado al lado derecho del motor y culata de 4 válvulas.

Del MTX también recoge el sistema de la microhibridación. Se trata de convertir al alternador en un motor eléctrico que ayude al motor térmico en las salidas desde parado aportando un plus de aproximadamente medio CV que hace un poco más brillantes sus aceleraciones. Por defecto, la microhibridación está desconectada y habrá que activarla desde la piña derecha. Cuando se ha activado, la pantalla de la instrumentación avisa con el mensaje “Assist” y advierte de que está en funcionamiento con “Power”. Pero solo funciona en las salidas en parado; se desconecta a los 8 segundos o antes si se superan las 7.500 revoluciones o si la tensión de la batería está por debajo de los 11,5 V.

El motor también incluye el sistema de parada a ralentí Start&Stop desconectable desde la piña izquierda, y que funciona “resucitando” al motor con fluidez después de su parada cuando se encuentra en ralentí, evitando un consumo inútil, aunque mínimo. Está claro que el Fort 125 N, viene muy completo.

Instrumentación a lo grande

Otro buen detalle que se valorará de inmediato es la instrumentación por medio de una gran pantalla TFT a color de 7 pulgadas, casi con toda seguridad el tope de su categoría y que se ve muy bien sobre todo con mucha iluminación exterior. Sus dos visualizaciones gráficas no están muy conseguidas, disponiendo cada una de ellas su versión en negativo con baja luz exterior para no deslumbrar al piloto.

Dependiendo de la visualización elegida, la pantalla muestra mucha información. Además del velocímetro y cuentavueltas, así como los niveles de gasolina y temperatura del motor, voltímetro, temperatura ambiente, dos cuentakilómetros parciales y total, y reloj horario, además de una nutrida colección de testigos.

Y no podía faltar la función “Mirroring” que clona la pantalla de tu móvil en la TFT a través de la App Carbit Ride, sirviendo de gran ayuda para visualizar la navegación a través de Google Maps.

El menú de la pantalla de ajustes se hace más amigable al emplear iconos en lugar de textos, aunque ayudaría mucho un sistema más intuitivo de botones tipo joystick.

Primeras impresiones

La primera buena sensación al acomodarse en su asiento es que se eleva a unos contenidos 780 mm de altura lo que permite a los usuarios de tallas de más de 170 cm poder apoyar ambas plantas de los pies en el suelo sin dificultad. Con un recorte en la parte posterior de las plataformas horizontales para apoyar los pies se podría reducir el arco de montura y hacer más accesible el puesto de conducción a tallas inferiores.

En marcha te permite dos posiciones de conducción diferentes: apoyando los pies cómodamente en las plataformas horizontales o estirando las piernas sobre las plataformas inclinadas en carretera. El mullido del asiento resulta correcto quedando el respaldo que hace de escalón con el asiento del pasajero algo alejado para las tallas estándar.

En marcha muestra un buen aplomo y se guía con suma facilidad. Ayudan mucho las suspensiones en ese punto de tarado ideal que aporta confort y, a la vez, firmeza en el trazado de curvas. Los neumáticos CST se comportaron bien y dieron confianza sobre el asfalto seco que acompañó a la prueba.

En lo que respecta a frenos, nos encantó el disco delantero por potencia y dosificación, mientras que al trasero le ocurre lo habitual: que su canal de ABS interviene a la mínima y resta su mordiente final. Como ya hemos comentado en otras ocasiones, habría que plantearse prescindir del ABS trasero o desconectarlo ya que es fácil de controlar un bloqueo en el freno trasero y reduciría la distancia de frenado.

Bien por la protección que ofrece su escudo frontal y parabrisas regulable en altura. En ningún caso distorsiona la visión.

En lo que respecta a prestaciones, habrá que esperar a una prueba a fondo con telemetría. Esta primera toma de contacto se desarrolló sobre un recorrido de unos 100 km sobre carreteras de montaña y en una ocasión llegamos a ver los 105 km/h en su velocímetro. En el único tramo por autopista, el viento frontal no nos permitió superar los 100 km/h también de velocímetro.

En cualquier caso, el QJ Fort 125 N nos ha demostrado su buena disposición como scooter Gran Turismo y aún nos ha gustado más su precio de adquisición justo por debajo de la barrera de los 3.000 euros (2.999 €) incluyendo 6 años de garantía y un año de seguro. Está disponible ya en colores negro, gris y rojo.

Primer vistazo

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Excelente tren delantero con una rueda de 15 pulgadas (casi rueda alta) acompañada por una suspensión convencional por horquilla de eje centrado que proporciona 100 mm de recorrido con ese tarado en el punto medio ideal entre confort y firmeza para trazar curvas.	Las manetas se ajustan ergonómicamente al piloto permitiendo la apertura en cinco posiciones sin necesidad de utilizar herramientas e incluso con los guantes puestos.
El portabultos en fundición integra las asideras del pasajero y ofrece una superficie plana que se adapta al soporte estándar de cualquier marca de Top Case.	El piloto trasero se desdobla en dos ofreciendo cada uno de ellos luz de posición y de freno mediante matriz de diodos LED. Entre ambos se ha practicado una tapa que podría albergar una cámara de video trasero aunque ni se ofrece como accesorio ni cuenta con preinstalación.
La llave Smart Key es un punto a favor en el uso diario ya que no requiere ni buscarse la llave en los bolsillos ni quitarse los guantes. Basta con que se encuentre en las proximidades para que el sistema lo detecte. El contacto se maneja a través de este pomo disponiendo de botones para abrir el asiento y la tapa del depósito de gasolina.	El depósito de combustible da cabida a 11,7 litros de capacidad con acceso a través del tapón con cierre de bayoneta. Se declara un consumo bajísimo de 2,6 litros/100 km, con lo que se obtendría una autonomía de 450 km.
En la parte superior de la piña izquierda podemos ver junto a la empuñadura el mando para regular de forma continua el parabrisas y los botones SELECT y ENTER para moverse por el menú de la pantalla.	El freno delantero se confía a un disco de 256 mm mordido por una pinza flotante de doble pistón que ofrece una generosa potencia de frenado fácil de dosificar.
El faro se compone de doble óptica polielipsoidal cada una de ellas con sus correspondientes focos de cortas y largas, Por encima de ellas discurre una guía luminosa para la luz de posición. Entre las ópticas vemos una tapa par añadir una cámara onboard aunque no se ofrece como accesorio ni cuenta con preinstalación del cableado.	El espacio interior del Fort 125 N está muy bien aprovechado con capacidad para dos cascos (integral + abierto). El compartimento cuenta con iluminación y un par de tabiques retráctiles que podrás situar según tus necesidades.
El asiento con cómodo mullido, se eleva a 780 mm del suelo permitiendo apoyar ambas plantas de los pies sin dificultad para tallas mayores del metro setenta. Hay espacio de sobra para el pasajero.	Detrás, la suspensión se confía a un par de amortiguadores de largo recorrido con muelle de doble paso y ajuste de precarga en cinco posiciones, cuyo tarado se complementa muy bien con el de la horquilla.
La guantera derecha incluye en su interior una doble toma de carga USB (estándar y tipo “C”).	La guantera izquierda no guarda simetría con la derecha y se abre de lado. Ninguna de las dos guanteras está protegida por cerradura.
El motor deriva del que conocimos para el QJ MTX. Es un motor compacto que rinde casi los 15 CV límite para la convalidación y que incorpora la tecnología de la microhibridación, convirtiendo al alternador en un motor eléctrico que aporta un plus de aceleración en las salidas.	La piña derecha incorpora el botón para activar los intermitentes de emergencia y el interruptor rojo multifunción que sirve para activar o desactivar la parada a ralentí, arranque eléctrico y activación de la microhibridación.
La piña izquierda está muy poblada. Además del conmutador de intermitentes y claxon, y los antes mencionados mandos para el parabrisas y control de la pantalla TFT, concentra en el gatillo de ráfagas el conmutador de luces larga y corta.	Dos buenos detalles para un scooter Gran Turismo muy recomendable: el parabrisas que se ajusta con servomotor en altura, y los retrovisores que se pliegan en caídas protegiéndolos.
El caballete lateral está fabricado en fundición de aluminio. Todo un lujo. Ofrece un apoyo muy estable en paradas breves. Y cuenta, por supuesto, con interruptor cortacorrientes para evitar que ruedes con él extendido.	Esta es una de las visualizaciones en negativo con baja luminosidads exterior mostrando la velocidad con grandes dígitos, niveles gráficos de temperatura y gasolina, y cuentavueltas gráfico en vertical.
La otra visualización en modo positivo con luz de día. Gráficos muy psicodélicos, pero con mucha información. Un diseño más sobrio resultaría más elegante y fácil de consultar en marcha.	El menú de opciones de la pantalla por iconos resulta más amigable que el sistema tradicional de textos seleccionables.