Macbor le ha cogido el gusto a la vitamina EVO. Lo vimos recientemente con la prueba de la Montana XR1 que EVOlucionaba con importantes mejoras de equipamiento, seguridad, potencia e, incluso, el precio. Ahora, acaban de aplicar la vitamina EVO a sus dos modelos custom, la Rockster y Rockster Flat, que aportan un motor refrigerado por aire potenciado en un 28% con culata de 4 válvulas, frenos ABS, nueva decoración y, todo ello, manteniendo su precio anterior en 2.499 € y 2.599 €. Apenas han pasado un par de años desde que Macbor nos presentó la segunda generación de las custom Rockster, y ya hemos podido realizar el primer contacto de su tercera que lleva el apellido Evo como hace poco conocimos en su hermana aventurera la Montana XR1 Evo 125.

Sigue ofreciéndose en dos variantes: la Rockster Evo y la Rockster Flat Evo. Exteriormente apenas han cambiado; tan solo las distinguirás por sus nuevos gráficos. Ni siquiera encontrarás el Evo en la denominación que aparece en las triangulaciones del bastidor que encierran el filtro de aire y la batería.

Pero sí que aportan modificaciones poco visibles pero muy apreciables. Sin lugar a dudas, el cambio más importante se encuentra en el motor. Recordemos que se recurría a un motor refrigerado por aire de inspiración Honda CB-F, y aunque por fuera parezca el mismo, lo cierto es que se ha cambiado casi por completo. El principal se encuentra en la culata que ahora recibe 4 válvulas en lugar de dos estrenando una tapa de balancines con un aleteado muy característico y que, sin duda, colaborará a la disipación de calor que ahora será más necesaria. Esto, junto con un aumento de la relación de compresión de 9,5 a 12, y unas medidas internas de carrera corta (53,3 x 48,4 mm en lugar de las 52,4 x 57,8 mm anteriores) permiten elevar la potencia máxima desde los 9,5 a 12,2 CV a 9.500 vueltas. Y se nota. Como también se nota el empuje que alcanza un máximo de 9,9 Nm (antes 9,0 Nm) a las 8.000 revoluciones. En Macbor nos aseguran que la caja de cambios estrena nuevas relaciones, manteniendo el eje de equilibrado para anular por completo sus vibraciones. De la inyección se ocupa ahora La marca FAI aportando un nuevo mapa de inyección para este motor que, casi con toda seguridad, es el mejor refrigerado por aire que conocemos del mercado de las 125 cc.

Pero no solo de mayor potencia y prestaciones se basan las nuevas Rockster Evo, también aportan mejoras en seguridad estrenando un modulador ABS de doble canal independiente en lugar del sistema combinado CBS anterior, aplicado a los mismos discos de 267 y 240 mm, mordidos en ambos casos por pinzas flotantes de doble pistón, aunque sin perímetro Wave. Lo que no se ha hecho es añadir el control de tracción TCS que son simplemente unas líneas de código más en el firmware del ABS para controlar la velocidad de la rueda trasera en comparación con la delantera cuando no se usan los frenos.

En el resto de sus componentes no hay cambios, manteniendo el bastidor desmontable del tipo simple cuna desdoblada justo debajo de la pipa de la dirección, la misma horquilla convencional de 37 mm y generoso recorrido de 134 mm, con las barras protegidas por fuelles de goma, los dos amortiguadores con depósito separado que simulan funcionamiento por gas, depósito de 13,5 litros de capacidad tipo cacahuete (peanut), alumbrado Full LED, llantas de radios de 18 y 15 pulgadas (neumático “gordo” detrás) y el cuadro con pantalla digital LCD que ahora añade el testigo del ABS.

Dos versiones: Rockster Evo y Rockster Flat Evo

Desde que se estrenó allá por el 2017 la primera generación de la Rockster, Macbor diversifica la Rockster en dos versiones: La Rockster que sigue un estilo tradicional custom clásico y la Rockster Flat con filosofía Bobber. La base de ciclo, suspensiones, depósito y motor es la misma.

La Rockster se reconoce de inmediato por una decoración más elegante, respaldo acolchado para el pasajero, estriberas de plataforma, manillar tipo “cuernos de vaca”, y un asiento con faldones laterales más envolventes. En cuanto a colores, la Rockster se sigue ofreciendo en tonos brillantes rojo y negro, a los que se une para esta edición Evo un elegante Gilver achampanado que mezcla el dorado con plata. Su precio es de 2.499 €, el mismo de la versión 2023.

Por su parte, la Rockster Flat muestra su rebeldía hacia lo clásico con un manillar plano (de ahí lo de Flat) más bajo y corto, asidera trasera, estriberas cilíndricas y un asiento con los faldones laterales más cortos que dejan ver más completa la carrocería lateral sobre la que se apoya. Se sigue ofreciendo en los mismos tres colores: verde, negro mate y el llamativo amarillo con el que seguro que no pasarás desapercibido. Su precio es de 2.599 €, sin cambios respecto a la versión 2023.

Primeras sensaciones

Con una altura de asiento de 730 mm y una cintura estrecha, no habrá problemas para que cualquier talla se acomode a gusto pudiendo llegar con ambas plantas de los pies al suelo. La posición de conducción la marcan principalmente los manillares; los ”cuernos de vaca” de la Rockster te hacen llevar la espalda erguida con las “manos arriba”, mientras que el plano de la Rockster Flat es 5 cm más bajo y también más estrecho haciendo que encorves ligeramente la espalda sin llegar a la radicalidad de una Café Racer.

En lo que respecta a los pies en marcha, las estriberas tipo plataforma de la Rockster te permiten relajarte, aunque para hacer uso del pedal de freno tendrás que despegar el pie derecho. En la Rockster Flat, sus estriberas cilíndricas de goma te permiten tener a tu alcance el pedal de freno sin levantar el pie, aunque se hace más notable la fatiga por mantener los pies más alejados por efecto de la gravedad al llevar las piernas estiradas hacia delante. Si inclinas demasiado, llegarás a rozar cualquiera de las estriberas con el suelo.

Como hemos comentado antes, se aprecia la potencia del motor que resulta muy lleno en cualquier régimen. Incluso te permitiría alargar el desarrollo sin perder tracción en primera porque en la mayoría de las cuestas arriba no hace falta reducir a cuarta. En carreteras de montaña, donde pudimos rodar con las Rockster, se manejaba muy bien en tercera y cuarta, evitando reducir a segunda donde se notaba un gran salto. El cuentavueltas de su pantalla LCD no se leía bien, pero parecía entrar en acción el corte de encendido a las 10.500 vueltas que no está nada mal para un motor refrigerado por aire. De velocímetro llegamos a ver los 117 km/h con ligera cuesta abajo. Con ese depósito de 13,5 litros de capacidad podrás poner su buena voluntad para realizar largos viajes sin repostar con cruceros de 100 km/h de velocímetro, aunque insistimos en desahogarlo si ruedas mucho tiempo a altas revoluciones.

Elijas la Rockster que prefieras, vas a contar con un buen vehículo de lo más polivalente que te permitirá usar a diario en tus desplazamientos urbanos, y con el que también disfrutarás los fines de semana saliendo por carretera.

Primer vistazo

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La piña derecha reduce a dos sus mandos: el interruptor cortacorrientes en rojo y el botón de arranque. Fíjate en el depósito de líquido de frenos redondo con tapón a rosca.	Al depósito de 13,5 litros solo se le puede criticar por no unirlo con el tapón a través de una bisagra. Este está situado a la derecha con el fin de ayudar a llenarlo al máximo si repostamos con la pata de cabra.
El faro de la Rockster es de diseño propio con un halo de guía luminosa en su perímetro y sus focos de corta y larga ocupando los semicírculos inferior y superior, respectivamente. Los intermitentes, también de LEDs se sitúan en los extremos de la tija inferior.	Los discos de freno han perdido el perímetro Wave de la versión anterior, pero mantienen las mismas medidas. El freno delantero mide 267 mm y está mordido por una pinza flotante de doble pistón, disponiendo ahora de ABS en lugar del combinado CBS precedente.
La Rockster clásica se preocupa del pasajero proporcionándole un respaldo acolchado que hará mucho más cómodos esas rutas de largo recorrido si prefieres hacerlas acompañado. Al nuevo motor no le da miedo el peso extra.	Original piloto trasero de aspecto minimalista con un arco superior segmentado para la luz de posición y un segmento central para la de freno. Los intermitentes son rectangulares fijado elásticamente al bastidor.
Las estriberas tipo plataforma nos resultaron más cómodas pilotando con las piernas extendidas, aunque en curvas cerradas tienden a rozar con el asfalto. Para pisar el pedal de freno, con generosa superficie antideslizante, hay que despegar el pie de la estribera.	La decoración del depósito nos resulta mucho más elegante en la Rockster presumiendo de la marca con grandes caracteres. La “tartera” derecha bajo el depósito esconde la bobina de alta tensión.
Ambas Rockster cuentan con amortiguadores “piggy back” con depósito separado son “fake” ya que no cuentan con funcionamiento por gas a sumar al hidráulico. Tampoco dispone de regulación de precarga. Vienen con un tarado tirando a duro para todo uso. El desarrollo se podría alargar con un piñón de un diente más para conseguir más velocidad máxima sin forzar la mecánica a altas revoluciones.	El disco trasero mide 240 mm y está mordido por una pinza flotante de doble pistón. Al igual que el delantero, ha perdido el aspecto Wave y añade el ABS.
Una norma “custom” es independizar las cerraduras de contacto y bloqueo de la dirección en dos diferentes. La del bloqueo se encuentra bajo la tija inferior girando la dirección a la izquierda, mientras que el contacto se encuentra bajo el lateral delantero del depósito.	El modulador del ABS está muy a la vista por el lado derecho y muy expuesto al calor del motor. Se podría haber escondido en la “tartera” izquierda que está hueca.
El silenciador de escape tiene forma de puro con una salida casi horizontal. El tubo colector lleva embutido el catalizador en su parte delantera y, como obliga la directiva Euro 5+, se han añadido dos sondas lambda a su entrada y salida para controlar su desgaste.	Las estriberas del pasajero son sencillas fijadas también a un sencillo soporte que puedes desmontar del bastidor. La posición más retrasada de la rueda permite prescindir de los topes para que el pie no se cuele.
Fíjate en el curioso aleteado que lleva la tapa de balancines y también en la doble tornillería que se aplica en tres puntos del bastidor para facilitar su accesibilidad mecánica. La “tartera” izquierda está hueca y podría albergar en su interior el modulador ABS.	El protector del cárter no es un detalle muy “customero” pero más que proteger al motor lo hace en el tubo colector de escape sobre todo para el bulto que encierra al catalizador.
Pocas customs pueden presumir de contar con los dos tipos de caballetes. Generalmente se conforman con el lateral, bien equipado con sistema cortacorrientes que impide el encendido con la pata de cabra extendida, pero ambas Rockster añaden uno central que facilita las reparaciones, así como un estacionamiento mucho más estable.	El instinto rebelde y “malote” de la Rockster Flat no da demasiadas concesiones al pasajero sustituyendo el respaldo por una sólida asidera central.
El depósito de la Rockster Flat es el mismo de 13,5 litro con mezcla de estilos lacrimógeno y cacahuete, pero decorado con una sobria decoración.	El manillar de la Rockster Flat pone la denominación al modelo con forma plana y estrecha sin llegar a los radicalismos del las “Café Racer” que obligan a inclinarse más hacia delante.
Sentado no vas a apreciar la diferencia del asiento de la Rockster Flat ya que es un recurso más cosmético: se le han recortado los faldones laterales para dejar más a la vista la carrocería.	Así es el pedal de freno en la Rockster Flat: más discreto en tamaño y acompañado de unas estriberas cilíndricas en una posición más adelantada que cansa al llevar las piernas más estiradas.
El manillar de la Rockster es del tipo “cuernos de vaca” por la forma elevada con las puntas ligeramente cerradas hacia dentro. Resulta cómodo y permite llevar la espalda completamente erguida.	El cuadro de instrumentos sigue siendo el mismo de la versión 2023 con la única de diferencia de añadir el testigo ABS. Se basa en una pantalla LCD con mucha información: reloj horario, cuentavueltas, cuentakms, voltímetro gráfico, nivel de gasolina y velocímetro con grandes dígitos.